Al final va a ser que nada de nada

En marzo de este año Venezuela anunció la compra de material de Defensa a España. Además del infantiloide y destructivo ingenio de el Risas, aquel famoso armas pacíficas que dijo, ahora España, es probable que se tenga que enfrentar a unos contratos que no valen nada.

A modo de recordatorio, en marzo, se aprobó la venta de 4 patrulleras, 4 corbetas, y 12 aviones. En primer lugar no se tuvo en cuenta las litigiadas aguas de Venezuela, con Colombia como contraparte; y en segundo lugar, y con respecto a los aviones, en particular los CN235 de vigilancia marítima, tampoco se tuvo en cuenta que los sistemas son estadounidenses. Para que se va a leer los contratos de colaboración y de transferencia de tecnología. Tonterias.

En cuanto a lo de armas pacíficas, y no hay que perder de vista lo anterior (el triángulo Venezuela-Colombia-Estados Unidos), ... pues bueno, las corbetas de marras irían equipadas, cada una, con un helicóptero de ataque ruso, con misilies antibuque chinos y con radares y sistemas de defensa de ... ISRAEL. En definitiva, una indudable muestra de armas pacíficas. (Una muestra en la que también habría que incluir la compra de 100.000 kalashnikov; o la creación de unas milicias populares que pueden sextuplicar los efectivos brasileños, y que al parecer, no ha gustado ni a Lula ni a Uribe; por no hablar del reactor nuclear argentino que Chavez tiene intención de comprar, quizá con la sanísima intención de celebrar el nobel de la paz de Al-Baredei).

Con todo, se alegó una mayor carga de trabajo para los astilleros españoles, antes Izar, ahora Navantia. Carga de trabajo que parece que se va a pique. Un naufragio al que se unirán, según parece, los aviones CN235 de vigilancia marítima.

Pero hay más. Sí. A los quizá ya perdidos contratos con Venezuela, nuestro actual Gobierno ha hecho que se perdieran jugosos contratos con Israel o Australia. Y todo porque alguien no se levantó. Qué cosas. Podríamos seguir con más perlas de este tipo, pero el botón es suficiente.

La venta de armas es, guste o no, un negocio como otro cualquiera. Si bien hay un pero: hay que ser más o menos consecuente con los intereses de tu propio país ..., si sabes cuales son, qué esa es otra.

PS: Eso sí, mucha cumbre y esas cosas, pero de la gripe aviar nada de nada. Total, para qué.