Mirada de Occidente

"El mal es bien, y el bien es mal ..." Macbeth, William Shakespeare

viernes, diciembre 24, 2004

Plan navideño antiterrorista

La presencia de militares (armados, como por otra parte tiene que ser) en estaciones de tren, metro y demás lugares públicos, como protección antiterrorista, nos suscita varias preguntas.

Primera: si apareciera hijo de Alá con un cinturón de explosivos, los susodichos militares ¿qué harían?, ¿son agentes de la autoridad?, ¿pueden detenerle?, ¿tienen formación para manejar situaciones con civiles en un entorno NO de guerra?.

Segunda: ¿y si los que aparecen son de la ETA? No nos podemos imaginar la que se podía armar si apareciece el sinpar Josu Ternera en Chamartín y le da el alto un soldado, más que nada porque las reglas son preguntar después de disparar.

No sabemos si utilizar al Ejército en el mantenimiento del orden interno es acertado (sobre todo si tenemos en cuenta la no muy grande capacidad disuasoria que tiene), pero al hilo del plan navideño que se han sacado de la manga, convendría preguntarse que pasa con la desaparecida nueva Directiva de Defensa Nacional, ya que al parecer considera como uno de los objetivos primordiales al terrorismo. Va a resultar ahora, y después de tantos años que la ETA pasa a ser objetivo de los comandos de operaciones especiales, Legión incluida. O lo explican o menudo lio van a montar, aunque si tenemos en cuenta que el terrorismo moro es igual al etarra, el encaje de bolillos va a ser de órdago.

En fin, volviendo al tema, por supuesto que la vigilancia ejercida por el Ejercito en las infraestructuras: vías de comunicación, centrales eléctricas, presas y demás, nos parece de lo más apropiado.