Se acaba el año

Un año desastroso, o casi. Nuestra Cultura por los suelos en pos de un banal y cobarde multiculturalismo. La rendición preventiva que ya mencionamos. Así que menos mal que se acaba (o eso creemos).

En último caso de la dejadez-occidental ha sido la falta de información sobre los disturbios en la pacífica Australia. Y si no era falta de información, era directamente tergiversación. Tizas lo cuenta muy bien, pero no está de más hacer un sucinto resumen: un musulmán se dedicó a violar NIÑAS australianas porque no cumplían con el Corán (la Sharía esa que nos cae tan simpática), y para colmo de males dice que es lo normal y que el no ha infrido ninguna ley. Ha tener en cuenta es el último párrafo del "post" de Tizas: "En la corriente única de multiculturalismo de Australia se conceden tanto derechos como obligaciones: mientras que la diversidad cultural y lingüística ha de ser apreciada, cada australiano tiene que suscribir un estándar único de derechos humanos. El drama -como ocurre a menudo en Europa- es que esos principiuos no se aplican". Poco más que añadir, para nuestra desgracia.

En fin, a pesar de lo anterior, o no, parece, solo parece, que en algunos países de nuestro enterno se está haciendo frente a ciertos desaguisados, pero si bien puede ser un buen comienzo, sigue siendo poco.

Alemania, por ejemplo, va a exigir a los musulmanes un examen de conocimientos y de cultura, pero de la nuestra, es decir la Occidental, con los valores, derechos y deberes que ella implica. Haber si cunde el ejemplo. El recuadro que aparece muestra unos ejemplos sobre las preguntas que se van a realizar. Esperemos que haya muchas y que tengan que responderse en poco tiempo, para que no de tiempo a pensar.

E Italia se ha puesto dura con Marruecos a cuenta de la inmigración ilegal, al menos en principio.

Pero en otros lugares, como es el caso de Indonesia, la caza de cristianos parece estar a la orden del día. Esta misma mañana una bomba en un mercado cristiano. Ocho muertos. Lo anterior hay que sumarlo a las cristianas decapitadas en octubre, o a los veinte fallecidos, otras bombas, en otro mercado en mayo.

De todas formas, desde MdO os deseamos un feliz año nuevo.