Mirada de Occidente

"El mal es bien, y el bien es mal ..." Macbeth, William Shakespeare

miércoles, septiembre 14, 2005

¡¡CUMPLEAÑOS ... FELIZ??

Se celebra el sexagésimo aniversario de la ONU. Qué bonito. La verdad es que el momento es el mejor. Sí.

Para celebrar tan magno acontecimiento, se pensaba reformar la organización. Una pena que se pensara y ya solo se piense en salvar los trastos. Pero tampoco nos suena raro. Es normal que la ONU no haga nada a derechas. Bueno, si exceptuamos alguna que otra corruptela. En fin, mucho hablar de reforma y poco de los escollos hay que solucionar.

Con respecto a la "reforma": quiénes son miembros permanentes, y por qué, o desaparecerá el veto ...

En el mismo orden de cosas, la eficiencia de la ONU hay que seguir poniendola en cuarentena.
Por ejemplo: qué ha pasado con el petróleo iraquí. Uno puede llegar a pensar que el Secretario General de la Organización estaba en contra de la intervención estadounidense porque a su hijo se le cortaba el grifo de los millones. Piensa mal y acertarás.

Otro ejemplo: qué pintan en el Comité de Derechos Humanos paises como Cuba o Arabia Saudí ... A qué es gracioso.

Y más: por qué la ADF tuvo que intervenir en Timor, y de paso salvarle las vergüenzas a los chicos de Kofi. Y lo mismo en Sierra Leona, donde si no es por las tropas de Su Graciosa Majestad, Ruanda parecería un patio de colegio.

Para qué diablos sirve la ONU ... Es la gran pregunta. Lavar dinero, proponer estrambóticas alianzas, y mirar para otro lado, como Ruanda o Sudán lo atestiguan, se les da de maravilla.

Nos gustaría poner un ejemplarizante ejemplo además de la II Guerra del Golfo ..., pero no nos sale. En la lucha contra el hambre o en favor de los niños, las ONGs lo hacen infinitamente mejor. Al fin y al cabo no dependen, o no tienen tanta dependencia, de ciertas políticas.

Bien es verdad que si no existiera la ONU habría que crearla, pero quizá lo mejor sea crear, como Dios manda, una nueva y olvidarnos de la anterior. De todas formas, y en vista de que ni se reforma ni se acaba con ella, la ONU podría empezar a defender el derecho de injerencia de Glucksman y cía., incluida la lucha contra la pobreza (por aquello de quién se queda el dinero de las ayudas; y no, ahora no hablamos del hijo de Kofi). Sería un buen comienzo.